miércoles, 4 de enero de 2012

ironía y humor cada ocho oras y despues de las comidas

y de pronto te quedas a oscuras; mira que había luces eh!… de todos los colores e intensidades, peero… algo pasa en algún sitio. Algo se cruza por el camino y arrolla a esa pequeña historia que pasaba por ahí. Pero eso ya sabíamos que podía pasar (ha pasado siempre… asi que aquí estamos) de modo que no importa tanto. La sensación en el centro del pecho es la misma, ¡coño! Hasta parece que sea más fuerte… pero un poco más arriba hay un tío que ha pasado del “te lo advertí”  al “joder,¿ que esperabas?”  así que el dolor se va al instante, para bien o para mal… ¡anda! Espera, ahora vuelvo…   …y de pronto ese tio se lleva una patada en los cojones por parte de tu cabeza. Eso lo mantendrá un rato callado. Las luces de la feria salen de paseo otra vez. Suerte que estas no hay que desenrrollarlas… y vuelta a la vida feliz! No estoy enamorado pero quiero estarlo! Di que si!!! Y hasta aquí puedo leer, aunque podría pegarme toda la noche copia y pega  hasta quedarme dormido…
de modo que, estimado lector(jajaja sere gilipoyas, ni que esto lo fuera a leer nadie…), le recomiendo que haga como yo y se limite a disfrutar de cada pequeña cosa que se encuentre. Las cosas grandes son demasiado jodidas como para tomárselas en serio, asi que por si no lo había usted notado, en esos casos es mejor utilizar la ironia y el humor.

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